La autonomía de un coche eléctrico

Cada vez hay más concienciación sobre bajar los niveles de contaminación en las grandes ciudades. En este sentido, la demanda de vehículos eléctricos está aumentando en los últimos meses. Hay factores clave que deben tener en cuenta todos aquellos que deseen renovar el automóvil, como es la autonomía de un coche eléctrico. En este post explicamos todo lo que hay que saber. ¡Empezamos!

>> Beneficios de instalar un punto de recarga de vehículo eléctrico en un hotel

Cuánto dura la autonomía de un coche eléctrico

Depende de la marca del coche por la que se opte, pero es una realidad que la duración de la batería de los vehículos eléctricos es mayor. Desde el inicio de este tipo de vehículo, la autonomía ha permitido llevar a cabo nuestras necesidades de desplazamiento sin tener que parar en ningún tipo de estación de carga.

Esta depende de varios factores propios del coche como su peso, el tamaño de la batería o el tipo de motor eléctrico por el que optes. En líneas generales, su duración irá desde los 300 hasta los 600 o los 700 kilómetros. Obviamente, el desarrollo de este tipo de vehículos es continuo, por lo que en los próximos años aumentará hasta asemejarse a los coches de motor de combustión.

El clima también es un factor muy importante que afecta al rendimiento de nuestro automóvil. Cuando suben las temperaturas, también aumenta un poco la autonomía que pueda tener el coche, mientras que pasa todo lo contrario cuando llega el otoño o el invierno.

Estilos de conducción para ahorrar batería,

La mayoría de los vehículos tienen varios sistemas de conducción. Mediante el estilo de conducción económico, el propio coche ralentiza la velocidad punta que podemos alcanzar, pero también nos permite ahorrar batería, por lo que la vida útil es mayor en cada ciclo antes de cargarla.

También dependerá directamente del estilo de conducción por el que se opte. Es recomendable no apurar las frenadas porque, cuando el coche se mueve sin pisar el acelerador, el propio sistema recupera batería. Esto se inspiró con el KERS de la Fórmula 1, que permitía transformar la energía que desprendía el calor de los frenos en eléctrica.

Por tanto, se recomienda no pisar el acelerador a fondo porque esto aumenta el consumo de la batería. Al mismo tiempo, frena lo antes posible para recuperar algunos kilómetros que te permitirá atrasar el momento de parar en una estación de carga. Posteriormente, hay que tener en cuenta la marca y el modelo de coche que se elige, puesto que el tamaño de la batería determinará su autonomía.

Como conclusión, como hemos explicado a lo largo de este artículo, la autonomía de un coche eléctrico depende de múltiples factores que hay que controlar. Además de las especificaciones del vehículo, el estilo de conducción juega un papel fundamental.

Sin comentarios

Añadir un comentario